Mar
Facebook
Twitter
miércoles, 22 de septiembre de 2010
No acuses a mi corazón, tan maltrecho y ajado, que está
cerrado por derribo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario